Un agente se puede definir como: “Una entidad software que, basándose en su propio conocimiento, realiza un conjunto de operaciones destinadas a satisfacer las necesidades de un usuario o de otro programa, bien por iniciativa propia o porque alguno de éstos se lo requiere. “[3]
Se puede decir, que un agente es todo aquello que puede considerarse que percibe su ambiente mediante sensores y que responde o actúa por medio de efectores. Ver Figura 1.2.
2. Características de un Agente
Son muchas las características que debe tener un componente software o hardware para ser considerado un agente. A continuación se explicaran ciertas características de los agentes:
a. Autonomía: Pueden actuar basados en sus propios principios, sin la intervención humana o de software.
b. Habilidad Social: Representa la habilidad de interactuar con otros agentes a través de un lenguaje común.
c. Reactividad: Un agente debe reaccionar a estimulos o cambios en el entorno.
d. Pro-actividad: Son capaces de tomar la iniciativa y pasar a realizar ciertas acciones por sí solos.
e. Comunicabilidad: Deben ser capaces de comunicarse con otros agentes, asi como también con humanos.
f. Cooperación: Deben tener capacidad de trabajar en conjunto de manera de concluir tareas de interés común.
g. Movilidad: Pueden cambiar de localización de unos entornos a otros, ya sea dentro del mismo equipo o a través de una red de computadoras.
h. Continuidad temporal: Pueden seguir ejecutándose mientras dure su ciclo de vida.
i. Adaptabilidad: Pueden adaptarse a los cambios del entorno, para llevar a cabo eficazmente sus obligaciones.
j. Veracidad: Se supone que el grado de confianza que se debe tener en los agentes es máximo.
k. Benevolencia: No servirían de nada las características de sociabilidad o de coordinación, si los agentes no estuvieran dispuestos a compartir sus conocimientos.
3. Diferencia entre agentes inteligentes y software convencional
Hay dos principales características que distinguen a los agentes inteligentes del desarrollo de software tradicional, estas son la inteligencia y la agencia.
a. La dimensión de inteligencia se refiere al grado en el cual la aplicación utiliza razonamiento, aprendizaje y otras técnicas para interpretar la información o conocimiento al cual tiene acceso.
Se puede decir que hay tres niveles de formas de inteligencia:
- La forma más modesta de inteligencia permite al usuario expresar sus preferencias.
- Una forma intermedia podría formalizar un conjunto de reglas de razonamiento que combinadas con conocimiento a corto y largo plazo, siguiendo un proceso de inferencia puede conducir a la toma de alguna acción.
- Y un nivel superior es la capacidad del agente de modificar su capacidad de razonamiento, en base nuevo conocimiento derivado de muchas fuentes, es decir, aprender.
b. La agencia es el grado en el cual el agente puede percibir su entorno y actuar en el. Define al agente, en otras palabras, para que un programa sea un agente debe poseer autonomía, habilidad social, reactividad y proactividad.
4. ¿Por qué utilizar agentes?
El origen por el cual la tecnología de los agentes inteligentes surge es por la necesidad de aplicarlos a los sistemas complejos, donde la aplicación de las técnicas existentes ha fracasado o es muy difícil de comprender o mantener. Los agentes inteligentes surgen como una alternativa para dar solución a situaciones que la Programación Orientada a Objetos (OO) no puede resolver eficientemente.
Este paradigma constituye en la actualidad un área de profunda investigación, lo que trae como consecuencia que existan un gran número de criterios acerca de qué son los agentes y sus características fundamentales.
La necesidad de construir aplicaciones complejas compuestas de multitud de subsistemas que interaccionan entre sí. En este tipo de sistemas, la utilización de agentes y técnicas multiagente permite la gestión inteligente de un sistema complejo, coordinando los distintos subsistemas que lo componen e integrando objetivos particulares de cada subsistema en un objetivo común.
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